Es cierto que tanto la Revolución Industrial (fines del siglo XVII y principios del XIX) como la Revolución de la Información (siglo XX) surgieron en diferentes épocas. Es por ello que si bien el contexto en el cual se desarrollaron fue distinto, eso no imposibilita su comparación.
Se puede observar un importante cambio en lo que respecta al lugar de trabajo. En la primera hubo una gran parte de la población que se traslado del campo a la ciudad en busca de trabajo. La clase social predominante fue la obrera y se desarrollaron en las fábricas. En la actualidad existen los llamados teletrabajadores. He aquí la primer gran diferencia, en la cual los procesos migratorios son inversos. Es cierto que en los tiempos actuales la información está al alcance de la mano y que con solo un click se puede obtener de una manera más rápida y sencilla. Conocimiento es Poder, decía Peter Drucker.
Los avances tecnológicos constituyeron un factor clave para el desarrollo de, por ejemplo, internet. La red de redes posibilitó la creación de empresas digitales. Hoy existen muchos ejemplos de empresas que realizan sus negocios (E-Commerce) por intermedio de Internet.
Concluyendo, es importante destacar que ambas revoluciones tuvieron un gran impacto en lo que respecta a la calidad de vida de la sociedad pudiéndose observar a lo largo de la historia.
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